Lugar apto sólo para microrrelatos y pajaratadas varias de un escritor.
martes, 1 de junio de 2010
Cuadro.
Si un cuadro es feo, lo es por si mismo.
Con el agravante de alguna mirada o el beneficio de algún bienpensado.
Pero si por el mismo es feo, no puede ser culpa de la pared, ni del lienzo, ni de los colores, ni del marco, ni del pintor.
ni del pintor, claro.
ResponderEliminarLa culpa será del espejo en que se mira.
ResponderEliminarLa belleza como la fealdad dependen de la mirada de otro. Eso creo.
ResponderEliminarEfectivamente, es del espejo, la culpa. O del ojo que mira.
ResponderEliminarPara mí un cuadro es feo si existe otro que es bello, porque la belleza no puede existir sin fealdad.
ResponderEliminarUn beso "bellamente" feo
Parece que descartado el resto, queda que la culpa es de quien lo mira, puede ser, pues en cualquier sitio, sabiendo mirar, hay belleza.
ResponderEliminarSaludos.
Vaya con el cuadro. Vamos, que ni pintándolo.
ResponderEliminarBlogsaludos
pero acaso no hay veces que lo feo es (b)ello y viceversa?
ResponderEliminarLa belleza radica en la mirada del otro. Esa frase me da miedo.
ResponderEliminarDepender de la mirada de otro es no ser tu mismo.
Reivindico mi derecho a ser por mí mismo, lo que sea, bombero, fontantero, rubio, listo, guapo, alto, feliz e incluso feo.
Quiero ser mi yo y no ser el "yo" de tu mirada.
··· De esta reflexión queda exenta la mirada amada ¿o no?