martes, 5 de marzo de 2013

Premio.

Hoy he recibido un llamada en el teléfono móvil indicando que se ha fallado un premio a mi favor.

Me he indignado ya que no creo que darme un premio sea un fallo y así se lo he hecho saber a mi interlocutor, por supuesto, a gritos de indignación por la falta de respeto.

Durante diez minutos mi interlocutor ha aguantado mis improperios hasta que me ha hecho saber que todo era un error y que no me habían dado el premio.

Mi indignación fue aún mayor, era una broma de mal gusto jugar al ahora sí, ahora no.

 De haber sido de verdad el teléfono móvil, le hubiera colgado la llamada.

No hay comentarios:

Publicar un comentario